En 2010 se celebra el centenario del poeta Miguel Hernández. Se propone aprovechar este acontecimiento cultural y focalizar las energías generadas alrededor de él como oportunidades para una actuación en Orihuela.
El proyecto parte de un vacío y una ruina. Se plantea desde el principio como un problema de densidades y el desarrollo de los mecanismos para transformar este espacio interior creando un nuevo paisaje urbano que permita desarrollar los programas planteados y recomponer el desequilibrio espacial existente. Se trabaja con lo ocupado y lo no ocupado creandoun nuevo lugar global. Se actúa asociando heterogeneidades, generando diversos espacios a partir del contacto con los elementos del entorno existente /palacio, huerto naranjos, medianeras, patios, callejones…/, respondiendo así a la realidad cultural en que se implanta. Es un proyecto de ámbito intermedio entre escala arquitectónica y urbana, entendido como sumatorio concatenado de acciones espaciales que crean y ordenan el conjunto.
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